Salto BASE. Desde la torre del BEC

Ayer, domingo 13 de Abril de 2014, tres especialistas realizaron un salto desde lo alto de la torre del Bilbao Exhibition Center, en Barakaldo.  Era uno de los actos en conmemoración del X Aniversario de la Feria de Muestras de Bilbao en esta su nueva ubicación.

Es la primera vez que fotografío un salto de este tipo. Iba a decir que es también la primera vez que lo veo pero esto último no es exáctamente cierto. Cuando fotografío, mi cerebro se pone automáticamente en "modo foto" y ya no aprecio lo que pasa a mi alrededor como un espectador normal. Lo hago como el que se impone la obligación de transmitirlo a través de un recurso (las fotos) que tiene su propio lenguaje, bastante diferente al de la visión en directo. Vamos, que estuve allí, pero no se puede decir exactamente que haya visto lo que pasó. Espero que las fotos estén a la altura (en cursiva por si no se aprecia la sutileza) y que os provoquen al menos una parte de la impresión que yo sentí (a pesar de haber observado toda la acción a través del visor de mi cámara).

Había oído muchas veces esto de Salto BASE. Lo relacionaba con salto en paracaídas desde edificios y no me cuadraba el nombre. Como no había tenido que escribir nunca sobre ello, no me había preocupado de aclarar la aparente incongruencia. 

¿Por qué BASE  si el salto se produce desde el punto más alejado de la base del edificio?
¿Es porque se le considera un tipo de salto "básico"? Si este es un salto básico, ¿Cómo llamaríamos al que damos la gente normal donde termina la escalera mecánica?

No hay como la Wikipedia para resolver estas dudas. El nombre es realmente un juego de palabras. Aquí tenéis la explicación.

Vamos con las fotos. Lo primero un GIF que recoge el despegue (y parte de la caída libre) con una secuencia de 4 fotos. Fijaos en el saltador y luego mirad a las personas (fotógrafos incluidos) que están a su alrededor. Son una buena manera de recrear la trayectoria.

Por supuesto que todas las fotos que vais a ver están tomadas desde el suelo y con un potente teleobjetivo (algunas tienen además bastante recorte). Esto hace que la acción parezca desarrollarse muy cerca. No solo porque el teleobjetivo reduce la distancia al sujeto sino porque también aproxima los diferentes planos de la imagen (los correspondientes al saltador y al edificio). Esta percepción es tramposa. Nos permite apreciar en detalle lo que está pasando pero nos hace perder la visión de conjunto y nos distorsina la perspectiva natural (la que te pone los pelos de punta o...esos de corbata). La torre del BEC mide 95 metros. La foto que va a continuación representa mejor la visión de esa altura desde la acera que cualquier otra del reportaje. Los que van a saltar son para nosotros unos diminutos mosquitos y nosotros para ellos vulgares hormigas.

Tres más con valor fotográfico dudoso ya que el personaje principal queda prácticamente absorvido por el fondo. Las pongo porque me sirven para explicar lo que supongo será realmente peligroso en este tipo de saltos (dando por hecho de que ya has conseguido reunir las toneladas de valor necesarias solo para salir a la cornisa), el propio edificio desde el que se salta. No me quiero ni imaginar lo que puede suponer un enganchón accidental del paracaidas en algún saliente o que una racha imprevista de viento te empuje hacia la fachada. Mal compañero ha de ser el miedo si practicas esta disciplina porque la mente tiene que estar suficientemente tranquila como para ordenar al cuerpo que se impulse con mucha fuerza en el salto y que adopte la posición de vuelo que le aleje lo más posible del punto del que se partió. No tengo ni idea de si esto que intuyo es correcto. Espero que, de no serlo, me corrija algún especialista si llega a leer el artículo.

Atrás queda la ingravidez propia de la primera fase del salto (la caída libre), el paracaídas se ha abierto y ha resistido el fuerte tirón del peso del saltador, se ha tomado distancia respecto al edificio. Estamos en la zona calmada  del vuelo, sustentados suavemente por un ala de tela.

Ya solo queda la aproximación al suelo (hay que librar las farolas) y el aterrizaje (en hierba mejor que en asfalto). Pilotaje de precisión.

Muchas horas de preparación y unos cuantos minutos de recogida del equipo. Todo para unos breves segundos de salto. Es evidente que tiempo e intensidad no son la misma cosa. En esos segundos de vuelo los saltadores vivirán emociones que a los que nos movemos por el suelo nos costará meses reunir.

No crucé ni dos palabras con los saltadores (quizá tenga la oportunidad de hacerlo si coincido alguna otra vez con ellos) pero a la vista de lo que llevaban rotulado en su ropa deduzco que forman parte del grupo Zion Flyers. Me he dado una vuelta por su página para informarme un poco de quienes son y qué es lo que hacen. Si os interesa el asunto podéis seguirles en este enlace.

No es la primera vez que se utiliza la torre del BEC para hacer salto BASE. Os pongo un video tomado desde la cámara sujeta en el casco de un saltador que voló hace bien poco coincidiendo con la Feria ExpoNatur. Vale que el objetivo de estas cámaras es un ojo de pez que hace que las distancias parezcan mayores de lo que son, pero ahora imaginad que sois vosotros los que la lleváis puesta. Y a lo que véis, añadidle lo que estarían recogiendo el resto de vuestros sentidos. El ruido amortiguado del tráfico, el viento en la piel, hasta el olor del aire tiene que ser diferente ahí arriba. Estoy casi seguro que la altura se tiene que percibir en esos momentos en el cuerpo como una sensación física (similar al dolor, el hambre o el calor).


Comenté más tarde con la gente de la Asociación Flow Balance (también andaban mostrando su actividad por el BEC) que me hubiera gustado hacer alguna foto desde arriba y me dijeron que a lo mejor me podían conseguir una acreditación la próxima vez. Después de ver este video, creo que renuncio.

Como he seguido fisgando un poco por la web sobre este tema, he encontrado este video que me ha parecido el "top" . Si no os impresiona suficiente la primera parte, esperad al salto en grupo de la segunda. Dicen que por nuestro cuerpo circulan cinco litros de sangre. Después de un salto como este, los protagonistas llevarán seis (5 de sangre + 1 de adrenalina) .