¿Te acuerdas de aquel viejo barco de pesca que sacaron del agua? El que luego llevaron hasta el parque más alto del pueblo y allí quedó a modo de estatua.
Claro que me acuerdo. Se tiraron tres años reparándolo y ahora lleva otros tantos envejeciendo sin que nadie se preocupe por él. Mientras lo recuperaban, se dijo que iba a ser la nueva sede de la emisora de radio local y luego se rumoreo también que aquel famosete iba a convertirlo en una especie de cafetería "supercool". Pero ¿Por qué me preguntas por él ahora?
Porque hace 19 días, por sorpresa, se ha instalado allí una clínica veterinaria.
¿Una clínica veterinaria en ese barco? Qué cosa más rara. Y cómo es que sabes los días exactos que lleva abierta con lo despistado que eres tú para las fechas.
Porque, desde la inauguración, no ha dejado ni un minuto de llover.
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