Iluminando objetos pequeños I

 

Aspectos Generales. Foto 1 y 2

En el artículo anterior os mostraba la Trayectoria Vital de un Tornillo a través de 10 fotografías de las que pongo a continuación un sinóptico.


Toca ahora hacer una valoración general del trabajo y explicar el montaje que se utilizó para cada una de las fotos.
En general, la historia ha gustado bastante a la gente que la ha visto. Como aficionado que soy, al primero que tiene que satisfacer mi trabajo es a mí mismo. Y estoy contento. Por los resultados y sobre todo, por la experiencia adquirida en la realización. El objetivo fundamental cuando me decidí a hacer esto era aprender y, una vez terminado, creo haberle robado un poco de espacio a la ignorancia. Es importante también tener algo que mostrar porque, al hacerlo, recibes comentarios y críticas de personas con bastante conocimiento fotográfico (tengo la suerte de tener cerca unas cuantas). Yo solo no habría llegado a profundizar o a darme cuenta de algunas de esas cosas.
Una conclusión que he sacado (quizá la más importante) es que con tiempo, esfuerzo y entusiasmo se puede llegar muy lejos. Con algunos medios hay que contar pero no son ni con mucho lo más importante. De hecho, cuando quieres hacer algo sabes (desde que te pones a pensar en ello) con los medios con los que cuentas y a ellos te adaptas.

Este trabajo lo inicié para adquirir experiencia en el manejo de los flashes. Me pareció bien empezar por preparar montajes con tornillos. Son modelos pequeños y pacientes. De momento no aspiro (todo llegará) a trabajar con modelos humanos que posen bien y toleren además mi falta de práctica en estas lides.


Características de estos objetos que marcan el modo de iluminarlos:
1.- Son metálicos y presentan algunas caras pulidas
Lo normal es que devuelvan reflejos intensos al recibir la luz. Los reflejos suelen llamar mucho la atención en una fotografía. Si ayudan a transmitir el mensaje que queremos, estupendo. Si lo que hacen es distraernos, debemos tratar de evitarlos.
2.- No se mueven.
Evidente ¿verdad? Los efectos de lo evidente suelen ser los que más desapercibidos pasan.  Al mostrar las fotos, un amigo me comentó que, en objetos que no se mueven, puedes utilizar sin problemas luz continua. Lo que ves mientras preparas el montaje (zonas iluminadas, sombras y reflejos) será lo que salga en la foto. Iluminando con flashes no sabes exactamente lo que va a pasar hasta que no ves los resultados en la pantallita de la cámara después de disparar. Con objetos que se están quietos, podrás fijar la cámara en un trípode y aumentar los tiempos de exposición todo lo que sea necesario. Sólo alguna ventaja tiene el uso de la luz del flash: 
- La posibilidad de usar velocidades altas te permite disparar con la cámara en la mano y probar rápidamente diferentes ángulos hasta encontrar el que mejore la composición. 
- Puedes utilizar un snot para concentrar mucho la luz. Interesante cuando quieres resaltar una zona pequeña en una escena que ya es pequeña de por si.
- En alguna foto hay movimiento y, para congelarlo, nada como el breve pulso de luz del flash.
Resumiendo, he utilizado luz continúa sólo en una foto y lo he hecho por un motivo extraño que en su momento explicaré. Este trabajo podría haberse resuelto casi todo con luz continua o combinando luz continua con luz de flash.
3.- Son muy pequeños
También evidente ¿no? Y no siempre lo he tenido en cuenta. Un aspecto muy importante al iluminar un objeto es el tamaño de la luz. Mas exactamente el tamaño aparente de la luz. Ese tamaño no es el que nosotros vemos, es el que ve el objeto que estamos fotografiando. Si queremos iluminar un elefante y le colocamos un flash a 10 metros, él lo verá como una fuente de luz minúscula (y será minúscula). Si queremos iluminar una hormiga con el mismo flash colocado a 10 centímetros, ella lo verá como una fuente de luz enorme (y será enorme). A veces no he tenido muy presente este detalle y he utilizado modificadores de la luz de flash que han llevado la luz hasta tamaños absurdos. Como si para matar una mosca, hubiera utilizado no un cañón sino una bomba atómica.
Este parámetro del tamaño de la luz lo fui percibiendo durante el trabajo pero he pensado más sobre él y lo he puesto en palabras a partir del siguiente comentario de otro amigo: No te emociones, la mayoría de lo que has experimentado no te servirá cuando te enfrentes a objetos grandes o personas.

El equipo utilizado para las fotos ha sido:
- Un cuerpo de cámara Olympus E-5.
- Un objetivo Olympus de 50 mm f:2 macro.
- Un flash Metz 58 dedicado a Olympus aunque esto es irrelevante porque siempre ha sido disparado con remotos Yongnuo CTR 301-P
- Un flash Yongnuo 560 disparado de la misma manera.
- Diferentes modificadores de la luz que se irán viendo en los montajes que mostraré. Algunos comerciales y otros caseros.
El orden con el que voy a mostrar los making off, no va a ser el de la historia sino el temporal en el que fueron tomadas. Es posible que se perciba así que, en la medida que avanzaba, ganaba algo de conocimiento y perdía un poco de frescura.


Foto 1.- Embarazo (1ª en la historia)


 Es el comienzo de la historia y coincide también con la primera foto. No es la primera imagen que visualicé pero, en cuanto decidí que iba a contar una trayectoria vital usando a un tornillo como protagonista, el embarazo vino rápido a la cabeza. Como me pareció un reto facilito, empecé por él.



En estas primeras fotos usé como soporte una mesa redonda. El fondo consistía en una cartulina negra pegada con cinta a la pared. Para esta foto ni la mesa hubiera hecho falta pero cuando empiezas a preparar algo, es instintivo contar con un suelo y una pared.
Luego metí el tornillo en una bolsa y lo colgué de una cuerda con una pinza. Ya solo quedaba iluminarlo con un flash por el costado (quería que no le llegara nada de luz al fondo). Se trataba de crear ese espacio oscuro y placentero que imaginamos (no conozco a nadie que se acuerde) se vive dentro del vientre de la madre.

 Demasiado sencillo. Algunas cosas hubo que corregir:
- Le puse ese difusor casero (un trozo de polipropileno traslúcido) delante del flash porque me parecía que había que matizar un poco la luz. Quizá no haya servido de mucho y lo realmente importante es lo que explico a continuación.
- Le di más altura a la posición del flash para que a la bolsa le llegaran los rayos de luz oblicuos. Con los rayos de frente, el plástico me devolvía unos reflejos muy feos. Quería que se viera bien la bolsa pero el plástico no es un material que yo relacione automáticamente con un amoroso útero. Si encima es un plástico brillante que deslumbra y en el que el destello oculta el tornillo que contiene, más que un recinto protector, me recordaba a una celda de tortura.
- Coloqué un reflector de andar por casa en el lado opuesto al flash para que el conjunto recibiera algo de luz por ese lado. Con sólo el flash, la foto parecía la luna en cuarto menguante.
- Evidentemente sobra mucha cartulina negra (además de la mesa como ya he dicho). Tened en cuenta que, cuando empecé, no tenía muy clara la composición y desde donde iba a sacar la foto. Si la hubiera tenido visualizada tal y como quedó al final, una cartulina Din A4 hubiera sido suficiente.

 

Foto 2.- Estudios (4ª en la historia)

Por razones que no vienen a cuento había manejado un antiguo libro de dibujo que me recordó mis tiempos de estudiante de ingeniería técnica y me pareció el fondo perfecto para una foto que transmitiera el concepto de estudio. Un calibre y un lapicero desdibujados por la reducida profundidad de campo del objetivo completaban el escenario. Siendo un tornillo el protagonista, lo que está estudiando no es mecánica sino anatomía.

La foto se tomó con dos flashes y el montaje es el que veis a continuación:

Un flash con su luz modificada por un paraguas más un reflector para rebotar algo de luz al lado opuesto. Estos dos elementos aportaban una iluminación tenue general. Una auténtica barbaridad para un escenario tan pequeño. Como un día tenga que iluminar un coche, con estos tamaños aparentes de luz, voy a necesitar cubrir con una tela un campo de futbol y encender todos sus focos. Si no os he conseguido aburrir del todo con este capítulo, en los dos siguientes veréis que utilicé modificadores de la luz más discretos y eficientes. Aprendiendo de los errores.

Otro flash con un snoot casero (con un nido de abeja casero también para concentrar más aún la luz). Está situado muy bajo para cumplir con un doble objetivo:
- Iluminar el tornillo sin afectar demasiado a la luz suave general.
- Sacar textura a la hoja de papel que hace de soporte de toda la foto.
En este caso, el reflejo sobre el tornillo creo le daba relevancia al protagonista dentro de la escena y no me preocupé por reducirlo.
La escena iluminada por separado con cada uno de los flashes quedaba de esta manera:

Los otros dos capítulos de esta serie:

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