La Profusión de la Primavera

Ya sé que la palabra (profusión) es un poco rarita pero es la idónea para definir lo que deseo expresar (abundancia en lo que se da, difunde o derrama). Me gustan las palabras que se utilizan poco porque suelen aportar ese matiz que se les escapa a las de  uso general. Esas que valen para todo y que de todo hacen tabla rasa.
Este artículo está conectado con otro que publiqué hace tiempo (Los colores del Otoño). Voy a dotarlo de la misma estructura y es también un experimento para expresar con imágenes un concepto para mí bastante trascendente.
Estamos en primavera, la estación del nacimiento en el ciclo de la vida. No hay época del año en la que la vida se pare pero es en esta donde los nacimientos se producen de una manera explosiva. Es el momento en el que la naturaleza echa el resto. Parece como si desconfíara de la capacidad de sus hijos para perdurar y los vierte en este mundo a puñados. Miles, millones de flores en los campos. Billones de hojas nuevas en los bosques. A esto me refiero cuando uso la palabra profusión y esto es lo que voy a tratar de representar con las pocas imágenes que van a continuación.


Y después de trabajar todas las fotos en color, con determinación (y un poco de frustración por la pérdida) decido que es el blanco y negro lo que procede. Porque el color es "calidad" y lo que quiero transmitir es "cantidad". Pienso que nuestro cerebro es muy práctico (o vago, según se mire) y tiende siempre a simplificar. Así, cuando recibe una imagen con miles de flores salpicadas entre la hierba,  para no saturarse, las reune todas en una a la que nombra en plural (flores amarillas) pero que para él es ya una única nube amarilla contrastando con un campo verde (que realmente son millones de hojas de hierba). Este ejercicio de abstracción ha generado un concepto simple y agradable (el contraste entre los colores lo es) y ha ocultado otro, el de la enorme cantidad de individuos que nacen de algunas especies para que, al menos unos pocos progresen y garanticen la supervivencia. 
¿Se ha notado mucho que soy de los que opinan que todos los caminos llevan a Darwin?

Explicado el concepto y por qué la decisión de presentar una antinatural primavera sin color, solo queda mostrar las fotos. Los planos elegidos en casi todas ellas (y los desenfoques en algunas) fueron decisiones que se tomaron sobre el terreno sin pensar todavía en un acabado final en blanco y negro. Pero sí se estaba pensando ya en imágenes que no dirigieran automáticamente la atención a individuos concretos. La puesta en escena final se ha ido forjando sobre la marcha pero se trató de potenciar desde el principio la idea de "muchos".



La idea no surge en la caminata por el bosque rodeado de gente en la que sí se tomaron unas cuantas fotos. Surge un día de un fin de semana en un pueblo lejos de mi casa. En el que estás ya de por sí un poco desconectado de la multiplicidad de microtareas y problemas cotidianos. En el que, además, te levantas pronto (duermo menos de lo que me gustaría) y sales y sacas a pasear a la perra del amigo que te ha invitado. Y en el que sientes con más intensidad el pulso de la vida que comienza en un día recién comenzado.



Nunca sabes si estos experimentos llegan a alguien o son una simple chaladura personal. Es lo bueno que tiene este blog. Me puedo permitir estos lujos porque con ellos tengo muy poco que ganar y absolutamente nada que perder.



Al igual que en "Los Colores del Otoño", finalizo el artículo con el contraste. Con lo que pude pero, para esta situación, no quise. Es el color, el espectáculo y la belleza individual. Nada que ver con "La Profusión de la Primavera".


Ya tengo una pareja de artículos sobre las estaciones. Me quedan dos momentos de inspiración (en verano y en invierno) para reunir un poker.

6 comentarios:

  1. Se lee muy bien. Quedamos a la espera de las otras dos estaciones

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    1. Muy amable Joseba. Estaría puliendo detalles del texto hasta el infinito (con las fotos soy mucho menos riguroso) pero reconozco que hay artículos que los siento más míos que otros. Y este es uno de ellos.

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  2. Adelante con la creatividad que muestras hacia la primavera. El resto de estaciones las vamos a seguir apoyando.

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    1. ¿Para que no se caigan?
      Es broma anónimo. No sé quién eres pero agradezco mucho tu comentario. Intentaré estar a la altura si le dedico un articulo al verano y al invierno.

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  3. Un poco chocante la idea de la primavera en blanco y negro, pero bien argumentada tu decisión. Aún así en alguna foto me cuesta verlo. Una redacción impecable como siempre, y es que si se tiene el don hay que aprovecharlo. ;-)

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    1. Como siempre, un comentario muy atinado Jesus (intercambio de halagos :-). Me gusta la parte en la que expresas que en alguna foto te cuesta verlo porque a mí también me parece que no todas muestran el "efecto" con la misma fuerza. Pero es que un artículo es también una creación. A través de una reunión de estímulos, recuerdos, imágenes y reflexión, nace una idea. Desde el mismo origen, se muestran en ella (o la promueven, no lo sé) de forma evidente algunos de los elementos anteriores. Otros se van incorporando después para que el argumento tenga un poco más de consistencia y no sea algo demasiado fugaz. En ese camino echas mano de lo que tienes. Y no siempre dispones de las piezas exactas para que el puzzle quede perfecto.

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