Las finalidades de la fotografía son casi infinitas. Diría que tantas como los fotógrafos que las realizan. Hay sin embargo un tipo de fotos dentro de esa nube de finalidades que se reconoce facilmente. Son las que se toman con la intención de describir de forma minuciosa y detallada el objeto fotografiado.
Intuyo que el enorme desarrollo que ha alcanzado la técnica fotográfica se debe en parte a este uso descriptivo. En determinadas circunstancias, reproducir un objeto mediante palabras o a través de un dibujo es mucho más costoso que hacerlo mediante un sencillo "click" en tu cámara.
Llevo meses dedicando muy poco tiempo a esta mi pasión que es la fotografía. El que dispongo lo tengo que compartir ahora con otra actividad diferente. Si seguís con regularidad este blog ya sabréis que, un poco porque siempre me ha gustado y otro porque la fotografía me ha acercado a ella, la tecnología despierta en mí mucho interés. Como no quiero abandonar nada de lo que me gusta me he embarcado en un nuevo proyecto tecnológico-fotográfico. Es la segunda generación (eso quiere decir que hay una primera) del disparador para fotografía a alta velocidad. Para presentar el proyecto y abrirlo a la comunidad BilbaoMakers (a la que pertenezco desde hace un tiempo) he utilizado diferentes herramientas de comunicación. La "fotografía descriptiva" ha sido una de ellas.
No se me ocurre mejor manera de explicar los componentes que voy usar que mostrándolos mediante una fotografía.
Luego, puedes perfeccionar un poco el lenguaje. Reuniendo elementos en la misma escena, no solo los describes sino que les asignas pertenencia a un grupo funcional.
Desde la pura descripción puedes llegar además a un lenguaje más simbólico. Con estas fotos se pretende comunicar que dos pequeños optoacopladores (las arañitas de 6 patas que se muestran delante) van a ser los encargados de disparar un flash o una cámara (los elementos que se muestran detrás).
Y con estas otras que vamos a utilizar un teléfono móvil como "mando a distancia". En él pulsaremos la funciónalidad y escribiremos los parámetros que luego enviaremos al disparador para que trabaje con ellos.
Al disparador terminado ya le dedicaré en el futuro un espacio en este blog. A pesar de ser una difícil empresa para mis capacidades, tengo pocas dudas de que vaya a convertirse en un aparato que funcione. El hecho de haberlo abierto a una comunidad tecnológica como la Asociación Bilbao Makers me genera mucha confianza. Tenemos un foro al que podéis acceder (también participar dandoos de alta) y seguir el desarrollo del proyecto. Voy a procurar documentar muy bien en él toda la evolución.
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